viernes, 30 de enero de 2015

MAS ALLA DE LA CIENCIA FICCION-II




Una civilización extraterrestre suficientemente avanzada podría vivir dentro de un agujero negro, conectados por agujeros de gusano entre ellos , y asi usar su energia para viajar por el espacio-tiempo, pudiendo utilizar también las famosas cuerdas cósmicas.

Las cuerdas cósmicas, representan una serie de defectos unidimensionales topológicos (espaciales) hipotéticos en el tejido del espacio-tiempo que son producto de la formación del universo. Gracias a ellos, se pueden crear curvas de tiempo cerradas que permitirían viajar al pasado. Para construir una máquina del tiempo de este tipo se propone utilizar las cuerdas cósmicas. En teoría, la convergencia de dos cuerdas entre sí o con un agujero negro proporcionará una serie de "curvas cerradas de tiempo similar". Y si se calcula con precisión el movimiento de una nave espacial en forma de 'ocho' alrededor de dos cuerdas infinitamente largas, en teoría sería posible trasladarse a cualquier lugar.
Se considera probable que una civilización super avanzada usaría los agujeros negros como fuente de energía, como medio de creación, como vehículo para viajar en el tiempo e incluso como habitat. Tomando en cuenta que estas Singularidades tienen unas características particulares que los hacen ideales para una especie de física hiperespacial controlada por entidades incorpóreas.
Si consideramos la ecuación de Drake, la probablidad matemática de que exista vida inteligente tomando en cuenta la enorme cantidad de estrellas y planetas que existen en el universo, llegamos a la rotunda realización de que o existen numerosas formas de vida inteligente esparcidas por el universo (o el universo fue creado específicamente para que existieramos nosotros, acondicionando las leyes de la física y las constantes de la naturaleza para que pudieramos existir) hipótesis que me niego a aceptar.
  
Si bien este problema conocido como el principio antrópico en la física se puede resolver con la teoría de los múltiples universos de Everett, en dicha teoría se asume que existen infinitos universos, algunos con pequeñas variaciones, otros con grande variaciones, lo cual nos indica que en algunos de estos universos existen inteligencias en otros planetas distintos a la Tierra, es más, que existen universos donde existen inteligencias extraterrestres en la Tierra.
Ahora bien considerando este universo, más allá del solipsismo de la física, de cualquier forma es altamente probable que se hayan generado inteligencias extratererstres y tomando la edad del universo es, muy probable que hayan podido evolucionar millones de veces más que nosotros. Según la esacla de Kardashev: una civilización inteligente de Tipo 1 podría utilizar la energía de su planeta en su totalidad y controlar el clima y su biología. Una civilización de Tipo 2 podría utilizar la energía de todo su sistema solar y viajar hacia otros sistemas estelares. Una civilización de Tipo 3 podría utlizar la energía de toda su galaxia.

Nosotros estaríamos apenas por llegar al ámbito de una civilización de tipo 1, comparado con nosotros una civilización tipo II o III podría tener tecnología totalmente imperceptible, como escribió memorablemente Arthur C. Clarke –quizás la clave de la verdadera exopolítica- “Una tecnología suficientemente avanzada es inidstinguible de la magia”. Se considera que una civilización que ha tenido 10 mil millones de años de evolución, algo completamente plausible si se considera que el universo tiene más de 13 mil millones de años, posiblemente haya dejado el cuerpo físico y entrado al ámbito de la postbiología, o al menos sea capaz de manipular la energía de las estrellas y de las galaxias y de sus propias partículas atómicas. Una supercivilzación hambrienta de energía no encontraría mejor fuente que los agujeros negros que atrapan cantidades incomensurables de masa. Los agujeros negros son mucho más eficientes en convertir masa a energía que los hornos alquímicos de las estrellas. Un verdadero imperio galáctico no se conformaría con nada menos.

Aunque es difícil y quizás inútil imaginar como sería esta civilización extraterrestre super evolucionada es probable que tendría control del tiempo espacio y podrían quizás fabricar sus propios agujeros negros para una serie de usos prácticos, como podría ser propulsión a chorro para sus vehículos espaciales o como agujeros de gusano para viajar a distancias de millones de años luz, para realizar la computación cuántica de toda la información del universo o incluso para viajar en el tiempo (hipótesis que se adapta a mi pensamiento).
Otra motivación para utilizar los agujeros negros podría tener que ver con la búsqueda de la inmortalidad. Para no depender de la vida de una estrella, podrían crear o servirse de agujeros negros ya existentes para suministrar energía a una estrella más allá de su etapa de fusión nuclear y prolongar su vida.

En un artículo científico el físico ruso Vyacheslav Dokuchaev plantea que partículas subatómicas como los fotones podrían tener órbitas estables dentro de los agujeros negros. Y señala que los agujeros negros supermasivos en los centros de las galaxias podrían permitir partículas e incluso planetas con vida, orbitando la singularidad sin ser destruidos. Una civilización podría vivir dentro de un agujero negro aunque tendría que acoplarse a condiciones extraordinarias como las enormes corrientes de fueza, así como la gran densidad energética generada a partir de que los fotones quedarían atrapados. Y también está el problema de la violación de la causalidad de las leyes del tiempo espacio. Pero en teoría es posible que seres cuasi divinos pudieran vivir en un vórtice de luz pura, su conciencia descargada en los fotones, en el centro de la galaxia, en una especie de eternidad intrauterina.


Podemos entender una fuerza evolutiva que permea el universo, la vida y la conciencia encontrando el camino para sobrevivir. Y ese camino en algún momento lleva a una forma de vida avanzada necesariamente a la creación de nuevos universos donde la trama pueda seguir urdiéndose. Tal vez los agujeros negros, el más grande misterio de la ciencia actualmente, sean esa zona inefable más allá del lenguaje y la realidad, más allá de la física, más allá de la ciencia ficción, más allá del tiempo, en la que soñamos esta existencia.


“Al tiempo que los ancestros distantes del hombre empezaron a salir del mar primordial, ya deben de haber existido civilizaciones en el universo envíando sus astronaves a explorar las regiones más lejanas del cosmos y conquistando los secretos de la naturaleza. Tales inteligencias cósmicas, creciendo en conocimiento por eones, estarían tan distantes del hombre como nosotros estamos de las hormigas. Podrían estar en comunicación telepática instantánea a lo largo del universo, podrían haber logrado la maestría total sobre la materia y de esta forma se podrían transportar instantáneamente a través de billones de años luz de espacio; en su última fase podrían abandonar la forma física y existir como una consciencia incorpórea inmortal en todo el universo”. Stanley Kubrick

"End of transmission".






lunes, 26 de enero de 2015

MAS ALLA DE LA CIENCIA FICCION-I



La Vía Láctea podría ser un «sistema galáctico de transporte» y la materia oscura, «otra dimensión», según una investigación que recuerda a la película «Interstellar».
En Interstellar, la película de ciencia ficción de Christopher Nolan, los protagonistas cruzan un agujero de gusano hallado fortuitamente en las cercanías de Saturno que permite viajar a varios mundos potencialmente habitables fuera del Sistema Solar. Bien, eso es parte de un guion de Hollywood, pero ¿y si nuestra propia galaxia fuera un enorme agujero de gusano, es decir, un túnel en el espacio y el tiempo?.Esa es la fantástica hipótesis con la que trabaja un grupo internacional de científicos y que ha sido publicada en la revista Annals of Physics.

La investigación, en la que ha participado la Escuela Internacional de Estudios Avanzados de Trieste SISSA, obliga a los científicos a repensar la materia oscura con mayor precisión.
«Si combinamos el mapa de la materia oscura en la Vía Láctea con el más reciente modelo del Big Bang para explicar el universo y postulamos la existencia de túneles de espacio-tiempo, lo que obtenemos es que nuestra galaxia podría contener realmente uno de estos túneles, y que el túnel incluso podría ser el tamaño de la propia galaxia», explica Paolo Salucci, astrofísico de SISSA y un experto en la materia oscura. «Pero hay más. Incluso podríamos viajar a través de este túnel, ya que, sobre la base de nuestros cálculos, podría ser navegable. Al igual que el que todos hemos visto en 'Interestelar'»..
Aunque túneles de espacio-tiempo (o agujeros de gusano o puentes Einstein-Rosen) han adquirido recientemente una gran popularidad entre el público gracias al filme de Nolan, han sido el foco de atención astrofísicos durante muchos años. «Lo que intentamos hacer en nuestro estudio fue resolver la ecuación en la que la astrofísica 'Murph' (el papel que interpreta Jessica Chastain) estaba trabajando. Es evidente que lo hicimos mucho antes de que saliera la película», informa Salucci. «Es, de hecho, un problema extremadamente interesante para los estudios de la materia oscura».
  


«Obviamente no estamos afirmando que nuestra galaxia es definitivamente un agujero de gusano, sino simplemente que, de acuerdo con los modelos teóricos, esta hipótesis es una posibilidad», matiza el investigador. Pero, ¿podría ser probado experimentalmente alguna vez? «En principio, podríamos probarlo comparando dos galaxias, la nuestra y otra muy cercana, como, por ejemplo, la Nube de Magallanes, pero todavía estamos muy lejos de cualquier posibilidad real de hacer una comparación de este tipo».
Para llegar a sus conclusiones, los astrofísicos combinaron las ecuaciones de la relatividad general con un mapa muy detallado de la distribución de la materia oscura en la Vía Láctea de un estudio llevado a cabo en 2013. «Más allá de la hipótesis de la ciencia ficción, nuestra investigación es interesante porque propone una más compleja reflexión sobre la materia oscura», subraya Salucci.

Los científicos siempre han tratado de explicar la materia oscura por la hipótesis de la existencia de una partícula particular, el neutralino, que, sin embargo, nunca ha sido identificado en el CERN u observada en el Universo. Pero también existen teorías alternativas que no dependen de esa partícula «y tal vez es hora de que los científicos se tomen en serio este asunto», concluye Salucci. "La materia oscura puede ser 'otra dimensión', tal vez incluso un importante sistema de transporte galáctico. 
En cualquier caso, lo que realmente necesitamos es comenzar a preguntarnos de qué se trata, e indagar los limites extremos de nuestra mente».


Información: http://arxiv.org/abs/1501.00490

"La ciencia ficción basada solamente en tecnología creíble está bien, ya que nos obliga a pensar en circunstancias extrañas e inusuales que involucran formas mundanas de tecnología. En este sentido, es más realista que la ciencia ficción basada en tecnologías fantásticas. Sin embargo, a modo personal, me gusta soñar, especialmente con tecnologías que expanden la imaginación e indagan los límites de lo que es posible". Michio Kaku


"End of transmission".






martes, 20 de enero de 2015

ONDAS DE RADIO DESCONOCIDAS



Científicos de varios países han conseguido observar en directo un 'estallido rápido de radio', una especie de fogonazo de ondas de radio procedentes de una fuente desconocida. Aunque no han averiguado la fuente, sí que han observado que no hay emisiones en otras frecuencias, y han descartado que se trate de una explosión estelar o una supernova. Podría tratarse, sugieren, de un 'terremoto estelar'.  Un equipo de astrónomos de Australia desarrolló una técnica para detectar estas rápidas explosiones de radio en tiempo real. La técnica funcionó y ahora un grupo de astrónomos, liderado por Emily Petroff (Swinburne University of Technology, de Melbourne), han observado por fin la primera explosión "en vivo", con el telescopio Parkes (Nueva Gales del Sur). Las características del evento indicaron que el origen de la explosión estaba a unos 5,5 mil millones de años luz de la Tierra.

Una vez que tenían la ubicación de la ráfaga, y tan pronto como la observaron, un buen número de otros telescopios de todo el mundo -tanto en tierra como en el espacio- fueron alertados, con el fin de realizar observaciones de seguimiento en otras longitudes de onda, además de las de radio.
"Usando el telescopio espacial Swift podemos observar la luz en la región de los rayos X, y vimos dos fuentes de rayos X en esa posición", explica Daniele Malesani, astrofísico del Centro de Cosmología Oscura, del Instituto Niels Bohr de la Universidad de Copenhague (Dinamarca).
Luego, las dos fuentes de rayos X se observaron utilizando el Telescopio Óptico Nórdico de La Palma. "Observamos en luz visible y pudimos ver que había dos cuásares, es decir, agujeros negros activos. No tenían nada que ver con las ráfagas de ondas de radio, simplemente se encontraban en la misma dirección", explica el astrofísico Giorgos Leloudas, del Centro de Cosmología Oscura.



La explosión podría haber arrojado tanta cantidad de energía en unos pocos milisegundos como el Sol en un día entero. Pero el hecho de que no viéramos luz en otras longitudes de onda descarta una serie de fenómenos astronómicos que están asociados con eventos violentos, como los estallidos de rayos gamma de las estrellas que explotan y las supernovas, que de otro modo habrían sido las mayores candidatas a ser el origen de la explosión", aclara Malesani.
Pero la explosión dejó otra pista. El sistema de detección Parkes capturó la polarización de la luz, es decir, la dirección en la que oscilan las ondas electromagnéticas y que puede ser lineal o circularmente polarizada. La señal de la explosión de la onda de radio tenía más de un 20 por ciento de polarización circular, lo que sugiere que existe un campo magnético en las proximidades.


"Si lo que quieres es encontrar los secretos del Universo, piensa en términos de energía, frecuencia y vibración". Nikola Tesla

"End of transmission".